Entonces buscando con el papá de Emma encontramos una tienda confiable en la galería Magdalena, en el distrito de Magdalena del Mar.

Acordamos que iríamos saliendo de su control mensual y así fue, claro que también nos acompañaron mis papás (los abuelitos de Emma). Al llegar a la tienda escogí unos aretes de oro de 18 en forma de corazón aunque habían otras dos opciones que son los clásicos estilo lentejita o unos planos. Además, también habían de distintos tamaños yo escogí los medianos, pero eso ya era elección mía porque todas las opciones que me enseñaron  eran de recién nacido ( abajo dejo la foto). 

 

Tras haber escogido que aretes Emma iba a usar la vendedora procedió a aplicarle un poco de alcohol y a desinfectar  todo. Luego  le marcó un punto en cada lado de la oreja, ese sería el lugar donde le pondría el arete.

Tengo que confesar que antes que le pongan los aretes me aseguré que los puntos se encuentren completamente derechos. Luego de eso confirme, con mucha emoción, que procedan a ponerle los aretes. 

Creo que la más nerviosa fui yo porque Emma no lloró nada, ella estaba bien concentrada tomando su leche 🤱, super fuerte mi bebé. Debo admitir que no podía dejar de admirar lo bello que le quedaron. 

Ojos los aretes tienen que ser de oro sí o sí y los precios varian entre 90 y 150 soles dependiendo del tamaño. Por otro lado, está es la primera foto de Emma con aretes y yo no paraba de hacerle fotos.